Mi padre siempre me ha dicho que, si hubiese algún medicamento eficaz contra la calvicie, Julio Iglesias no tendría el cesped tan pobre. Asumo que es un buen razonamiento, pero claro, no tengo el contacto directo de Julio y no le he podido preguntar sobre el tema.
La cuestión es que la pérdida del pelo es una de las mayores preocupaciones en hombres y mujeres. Obviamente los señores llevamos la peor parte del asunto, pero que hay mujeres a las que se les cae, es un hecho. En España, el 40% de los varones de 40 años sufre alopecia androgénica, el tipo de alopecia más común. Es de tipo hereditario, irreversible y progresiva, comenzando en las sienes, siguiendo por la coronilla y dejando el cuero cabelludo completamente despejado.

¿Las ampollas, champús, lociones y demás chismes cosméticos, no funcionan?
Champús, lociones, ampollas o nuevas técnicas como la ozonoterapia y demás lo único que hacen, científicamente probado, es disminuir tu cuenta corriente. En general, la cosmética tiene la batalla perdida contra la alopecia. Ellos lo saben pero el cliente no. Así pues no habrá temporada que no saquen ampollas, ungüentos y demás tratamientos (a un precio, habitualmente, desorbitado) con la promesa de hacerte crecer una cabellera descomunal.
Vamos a ver lo que nos cuenta la AEDV (Academia Española de Dermatología y Venereología). «Es cierto que existe un mercado engañoso sobre el uso de productos que pretenden ser beneficiosos para la caída de cabello. En primer lugar habría que aclarar que caída no significa necesariamente alopecia. El cabello tiene un ciclo vital en el que crece y cae, pero es sustituido por otro nuevo que acabará teniendo las mismas características que el pelo perdido, con lo cual, el problema se plantea cuando hay una desproporción entre el cabello que cae y el que nace, o bien cuando el cabello nuevo no tiene la misma calidad que el que ha caído, por lo tanto en la mayoría de las ocasiones la alopecia es más un problema de calidad que de cantidad. Desde luego la publicidad llama la atención sobre este tema con el fin de lograr una mayor venta, especialmente en esta época, cuando el pelo «se muda» después de la etapa de verano de forma importante, alarmando a la población de forma innecesaria ya que es un tipo de caída que se cura espontáneamente: por tanto cualquier tratamiento va a funcionar.»
En otras palabras, que casualmente las compañías de cosméticos llenan sus alforjas de euros después de verano, ¡coincidiendo con el ciclo natural de caída del cabello!
Pero Óscar, ¿y entonces los champús, lociones y demás…?
Como dicen los expertos de la citada asociación, los champús son excelentes cosméticos de limpieza que sirven para lavar el cabello sin dañarlo, dándole propiedades cosméticas (suavidad, hidratación…). A veces pueden ayudar a controlar, dependiendo de su composición, algunas patologías leves de cuero cabelludo (seborrea, caspa), pero ni producen caída ni crecimiento del pelo, por lo tanto, hablar de «champú anticaída» es solamente un truco comercial. No existen.
Tampoco existen las lociones milagrosas. No te molestes en embadurnarte la cabeza con tal o cuál loción, el único que va a salir ganando es el fabricante de la loción y el de la funda de tu almohada. Otros tratamientos orales en forma de vitaminas, antioxidantes etc., es decir los suplementos nutricionales, no han demostrado su utilidad en el tratamiento de la alopecia.
¡Dios mío! ¿Pero hay algo contra la alopecia?
Si has llegado hasta aquí es obvio que te interesa el asunto. Y la respuesta es… ¡SÍ! Hasta el momento solo dos medicamentos han demostrado, científicamente, su eficacia. El minoxidil (de uso tópico) y la Finasterida. El último estudio realizado, de Julio de 2017, así lo dice: «Este estudio sugiere fuertemente que minoxidil, finasteride, y la terapia con luz láser de baja intensidad son efectivos promoviendo el crecimiento del pelo en hombres con alopecia androgénica. Además el minoxidil es efectivo en mujeres con alopecia androgénica».
¡La noticia es fantástica! Efectivamente, SÍ HAY MEDICAMENTOS QUE TRATAN LA ALOPECIA TANTO EN HOMBRES COMO EN MUJERES.
¿Cuál te conviene más?
Si eres mujer, sin lugar a dudas el Minoxidil. El tratamiento es sencillo y económico. Con unos 50 euros tienes para cuatro meses. Eso sí, es pesadito: todos los santos días tienes que ponerte la dósis en el cuero cabelludo, darte un masajito, lavarte las manos y a la cama. Pero funciona.
Si eres hombre, te aconsejo igualmente el Minoxidil. Es sin receta médica, lo que ya facilita algo pero es que además, la Finasterida (que sí necesita receta), puede tener como efecto secundario una ligera disfunción eréctil. Y claro, a ver si por tener pelo vas a perder otro de tus encantos… 🙂 Por otro lado la Finasterida es algo más cara (sobre 650 euros al año), pero como positivo a su favor, es oral y no da tanta pereza como echarse el chorrito de Minoxidil en el coco.
Hemos llegado al final del artículo, ¡ahora ya sabemos que sí, que se puede remediar! Creo que es hora de crear el hastag #julioiglesisasescalvoporquequiere
PD: Y por cierto, no, la gomina no produce caída de cabello. Mi amigo Agustín Durán, de hecho, te muestra como aplicártela en este educativo vídeo.
Agradecimientos a mi querido Agustín, siempre tan generoso.