Cine y Medicina. Pero… ¿Pero es que te ocurre algo? ¿Estás en el hospital? Lo cierto es que las reacciones de los amigos que van enterándose del asunto varían entre el asombro y la alegría, y es que en la Medicina, todos tenemos bastante interés por la cuenta que nos trae…
La distancia entre la Medicina y el cine.
El tiempo medio que se tarda en sacar adelante un proyecto importante no baja de los 5 o 6 años, otros se van a 10, como es el caso de los dos últimos ganadores del Premio Goya, «Tarde para la ira» y «A cambio de nada». Así pues, por falta de paciencia no va a ser.
Otro punto en común es que, en ambas disciplinas, el trato personal es sumamente importante, o sea, que tampoco estaba tan alejado el asunto.
También creo que el cine es medicina para el alma, por lo que ¡ahora le toca al cuerpo!
Y por último, hacer cine implica no andar al 100% en tus cabales cosa que, tras echar un vistazo al plan de estudios, creo que también se comparte con los médicos.
Naturalmente esto no sería posible sin el apoyo total de mis padres y Gemita.

¡Y qué decir del hecho de poder ver películas de médicos y decir, con aire de suficiencia, eso no es así y esto y lo otro! 🙂 Aunque bien pensado eso ya lo puedo hacer, de hecho en España lo hacemos todos, ¿quién no opina de medicina con total tranquilidad? No hablemos ya de los vendedores de humo y estupideces varias…
¿Y no te ves mayor para empezar?
Creo que la vida es una cuestión de mirada.
Cuando éramos niños
los viejos tenían como treinta
un charco era un océano
la muerte lisa y llana no existía.Luego cuando muchachos
los viejos eran gente de cuarenta
un estanque era un océano
la muerte a lo más, una palabra.Ya cuando nos casamos
los ancianos estaban en cincuenta
un lago era un océano
la muerte era la muerte, de los otros.Ahora veteranos
ya le dimos alcance a la verdad
el océano es el océano
pero la muerte empieza a ser la nuestra.
En fin, crucemos los dedos porque, si Dios quiere, pronto comenzaré otra nueva película llamada Medicina, posiblemente la más complicada de todas las que he enfrentado, pero como a todas las demás, le dedicaré cuerpo y alma.