Seis años sin mi tío Pepe. Y aunque, lógicamente el dolor amainó; el recuerdo no lo hizo. Ahora ya estoy en 4º de Medicina, he visto tantas veces la maldita enfermedad que le arrancó de nuestro lado, que casi he normalizado el dolor que produce el solo hecho de nombrarla… Pero no te quiero hablar de enfermedades, tú ya estás en ese Lugar en el que la palabra patología debe ser una rama de la Ciencia que estudia el comportamiento de los patos.
Hoy quiero recordar tus risas.
Porque, años después de tu partida, me percato de que, tu personalidad también residía en ella. ¿Quién puede no querer a una persona con la sonrisa perpetuamente colgada de los labios? Te vi reír hasta quedar sin respiración. Como un niño. Que, en realidad, querido tío Pepe, es lo que no dejaste de ser jamás. Un niño travieso y gracioso al que todo el mundo quería. Incluso el imbécil del guarda con el que siempre tuviste tus más y tus menos. Hasta ese, ¡que fue a tu entierro y todo!

Querido tío Pepe, este año 2020 ha sido una soberana mierda. Tú, lo sé, te habrías puesto el mundo por montera y te habrías reído del bicho con alguna de tus frases ingeniosas. No puedes imaginar las veces que me acuerdo de ti, las veces que me digo a mí mismo: ¿Qué habría dicho de esto el tío Pepe? Y casi siempre la respuesta que imagino es alguna barbaridad. Porque sí, también tu personalidad se nutría de esas respuestas salvajemente inapropiadas que me hacían retorcer de risa.
No me voy a extender mucho, solo quería plasmar en unas pocas palabras lo mucho que te quise, lo mucho que te sigo queriendo y como, tu recuerdo, sigue siendo la prueba evidente de que, nadie muere del todo si alguien le recuerda.
You´ll be in my heart.
Te dejo esta canción titulada You´ll be in my heart, que es un tema en inglés y como no tendrás ni puta idea de lo que significa, ni maldita la falta que te hizo nunca la lengua de Shakespeare, te digo yo cómo se traduce: «Estarás siempre en mi corazón, tío Pepe». Lo de «tío Pepe», lo he añadido yo, porque Phil Collins no encontró traducción para tu nombre. Supongo que estaría en alguna de sus juergas. Ahora que lo pienso, habríais hecho buenas migas, canalla. La cosa es que yo creo que no lo puso en el título porque no sabía cómo traducirte. Y eso a pesar de que, en inglés, se puede escribir como: «the best uncle in the fucking world».

Te quiero.